Los colorantes comerciales pueden ser naturales o artificiales se extraen de plantas, vegetales y animales.
Por regla general la industria alimentaría utiliza estos aditivos para realzar el color de materias primas que no siempre son de primera calidad.
En recetas de conservas caseras el color natural de frutas y verduras es suficiente reclamo como para no tener que añadir ningún aditivo extra.
Pero a veces una conserva puede quedar deslucida por un exceso de cocción o por un sinfín de motivos.
En eso casos podemos intensificar el color añadiendo un colorante natural.
Colorantes naturales
Color verde: Se extrae del jugo obtenido de la trituración espinacas frescas
Color naranja: Se obtiene del azafrán en hebra disuelto en agua.
Color rojo: Se extrae de los zumos de fresas y remolachas.
Color marrón: Se consigue de la infusión de malta concentrada.
Color morado: Se extrae del zumo de las moras silvestres.